Cerca de la población, desde la cual se divisa, existe un pequeño cerro tutelar en el cual se ha erigido el monumento a “Cristo Rey”, lugar al cual se realizan aperiódicamente peregrinaciones o procesiones para invocar los favores y la protección para los habitantes del pueblo o para los intereses de cada devoto.
Las más de las veces se llevan a cabo las denominadas “rogativas”, que se hacen en las épocas en las que las temporadas secas se prolongan más de la cuenta y perjudican el calendario de cultivos y la provisión de agua de las comunidades. Existe la creencia de que con estos ruegos y procesiones hechas al lugar, es posible que llueva en forma inmediata y se eviten mayores padecimientos por la sequía.